No son muchas las novelas infantiles o adolescentes que generan polémica. “La excursión a Hanging Rock” es una de las que sí, tanto por su temática como por los acontecimientos que la rodearon. La historia se centra en Australia en el año 1900, y las protagonistas son las alumnas del Appleyard College, quienes realizan una excursión a Hanging Rock el día de San Valentín. La atmósfera es en todo momento inquietante y genera un aura de aprensión que no desaparece en ningún momento del relato. Además, los acontecimientos que se suceden no dejan de aumentar la tensión: varias alumnas y una profesora desaparecen para siempre; algunos relojes se detienen; y una alumna enloquece. Las consecuencias para la escuela y la familia son nefastas. La intriga es magistralmente mantenida por Joan Lindsay, quien fue criticada por el misterio sin resolver de la novela. Finalmente, tras fallecer, un epílogo fue publicado y se ofreció una solución a la historia, aunque la novela se sigue considerando un clásico de la literatura oscura para adolescentes.