Ondrej Sekora (1899-1967) fue un intelectual checo más conocido por su labor como artista y, concretamente, por su éxito en la literatura infantil (“Kubula y Kuba Kubikula”). Sekora es citado comúnmente como ilustrador, como escritor, como periodista e incluso como entomólogo. Además, llevó una fuerte campaña en su país para la promoción del rugby. Su pasión por el deporte era general, y trabajó como reportero y comentarista de este ámbito en varios medios. Más adelante serían tiempos difíciles para el artista checo, ya que fue capturado y llevado a un campo de concentración durante la Segunda Guerra Mundial, como consecuencia de la ascendencia judía de su esposa. Tras sobrevivir a la experiencia, Sekora describió lo vivido en su diario. Posteriormente se afiliaría al Partido Comunista. Su estilo de escritura es cómico, así como sus dibujos. Sus influencias llegan de Disney, Busch y Dubout.