Las novelas de ciencia ficción alcanzaron un auge entre el público adolescente en los años 50, 60 y 70. El contexto sociocultural y el avance de la ciencia y la tecnología alimentaron el éxito de este género en la literatura, sobre todo entre las nuevas generaciones. “Chocky” es uno de los mejores ejemplos de ello. Escrito por John Wyndham, un clásico en esta clase de libros, nos cuenta el comportamiento de un chico llamado Matthew cuando empieza a escuchar una voz en su cabeza. La novela está narrada desde el punto de vista del padre de Matthew, quien piensa que su hijo está loco o tiene amigos imaginarios. Chocky resulta ser una voz de otro planeta que se comunica telepáticamente con Matthew. No tiene malas intenciones, pero es cierto que Chocky cuestiona muchos de los actos y tecnologías del ser humano. Ambos discuten, y Matthew acaba desarrollando habilidades que antes no tenía. Entonces es cuando la prensa empieza a centrarse en ese extraño niño con “superpoderes”. Al igual que los mejores libros de ciencia ficción, la explicación definitiva y el suspense son mantenidos hasta el final, y pone sobre la mesa interrogantes que darán que pensar a más de uno.