Joanna Cannan (1898-1961) fue una escritora británica nacida en Oxford. A pesar de ello, Cannan siempre manifestó pasión por Escocia y su cultura, la cual conocía de las vacaciones familiares cuando era niña. A causa de ello, muchas de las historias que creó estaban ambientadas en este país del Reino Unido. Cannan ejerció como enfermera durante la Primera Guerra Mundial, período en el que conoció al que sería su marido. Como éste, quien había sido capitán durante el conflicto, resultó gravemente herido, Cannan fue la responsable de los principales ingresos del hogar. Es por ello que Cannan se tomó en serio su papel como escritora y prolíficamente escribió un libro por año hasta su muerte. Joanna Cannan es famosa por sus historias de ponis (“Un poni para Jean”) y de detectives (“Asesinato incluido”), aunque también contribuyó con artículos en varias revistas.