La denominada caza de brujas fue una deplorable acción religiosa llevada a cabo a través de distintos siglos y en muchas partes del globo, especialmente países europeos y Norteamérica. “La joven bruja” se centra en los eventos acontecidos en el siglo XVII en torno a esta temática, situándolos en Inglaterra y en la América colonial. Mary cree tener el don de la clarividencia y poderes de brujería, y visto el fatídico destino que su abuela sufrió por ella, la única opción es ocultarlo. La aventura que se desarrolla con este leitmotiv lleva a Mary desde su Inglaterra natal hasta las colonias de Ameríca, concretamente a las célebres poblaciones de Salem y Beulah. La tensión se sostiene por la inminente amenaza a Mary y a otros tripulantes. En su nuevo hogar, Mary acabará yéndose a vivir al bosque junto a otras personas de su condición, huyendo de las persecuciones. Celia Rees empleó “La joven bruja” también como vehículo de crítica a la intolerancia y a los crímenes religiosos.
Celia es una de las creaciones más fascinantes de la literatura infantil española. Esta chica es un buen paradigma de protagonista femenino con carácter. El personaje ideado por Elena Fortún es rebelde y ambicioso, y sus sueños le motivan a seguir adelante con sus travesuras. Se trata de la típica niña que por algunas acciones es bondadosa pero que por otro lado es un diablillo. Fortún mostró con Celia una mentalidad abierta para los tiempos que corrían, y su éxito se mantuvo desde su primera aparición en 1928 hasta los años 60’. Celia no tiene piedad con los adultos y a menudo se sorprende a sí misma criticando su comportamiento. Su inconformismo representa el pensamiento predominante en la España de antes de la Guerra Civil, y la mentalidad a medio camino entre la tradición y modernizarse. Se trata de una buena forma de acercarse a la España de antaño desde un punto de vista infantil, y reconocer los valores que predominaban.
El cartero Pat y sus aventuras son un caso de excepción en los universos infantiles. Normalmente, una obra surge primero como libro y posteriormente se realizan adaptaciones televisivas o cinematográficas de ella. En este ejemplo sucede al revés, el cartero Pat fue creado por Ivor Wood para la BBC, y John Cunnliffe, guionista de la misma, escribió los libros posteriormente. Curiosamente, mientras que la serie fue un éxito en Inglaterra, los libros han gozado de fama internacional. Los protagonistas son Pat, un cartero, y el gato Jess. A causa de su profesión Pat tiene muchos amigos, a los cuales visita al tiempo que trabaja. Pero obviamente también se encuentra inconvenientes que sortear, y a los cuales hace frente con una calma tremenda. Pat es un hombre sencillo, de familia, y enseña a los pequeños que no es necesario ponerse nervioso ante los problemas para solucionarlos, y que uno puede encontrar verdadero placer trabajando.