“Los niños del agua” es una obra de Charles L. Kingsley en el cual se plasma su ideología socialista y a la vez cristiana. Con ella se pretenden denunciar abusos como la explotación infantil, la prostitución o los trabajos mal pagados. Narra la historia de Tom, un niño huérfano que deshollina para el malvado jefe Grimes. Tras hundirse en un río se transforma en un “niño del agua” y es educado allí por unas hadas. Las hadas le aleccionan a través de situaciones divertidas pero a la vez duras. En el agua coincide con la chica de la que se había enamorado, la hermosa Ellie. Al final debe acudir a salvar a su exjefe, Grimes, debiendo deshacerse primero de sus sentimientos de rabia hacia él. Tras este acto, recupera su cuerpo y se convierte en inventor, revelándose además que Tom había estado muerto.