A lo largo de la historia los profesores se han calentado la cabeza para conectar con sus alumnos y así canalizar el conocimiento que quieren transmitir. Es una tarea complicada, puesto que las asignaturas a veces no acompañan. En otras ocasiones, algo apasionante puede tornarse aburrido por culpa de un maestro adecuado. Estos temas son los que Humphrey Carpenter trata en esta obra. Míster Majeika es un profesor mago, a ratos inepto, que aterriza con su alfombra mágica en una escuela primaria para dar las clases a su estilo. El señor Majeika hace la magia su principal baluarte para enseñar, y el resto de profesores empezarán a sospechar que algo extraño sucede en el colegio. Al mismo tiempo, Míster Majeika se empieza a meter en apuros cuando aplica hechizos que luego no sabe deshacer. Aunque los profesores estén en su contra, a lo largo de la serie de libros los propios alumnos son los que defenderán la figura de su querido profesor. La magia aporta ese toque intrigante y humorístico tan necesario en cualquier texto para niños.
Esta novela es un clásico de la literatura húngara y un ejemplo de relato protagonizado por una chica con fuerte personalidad. En “El buen maestro” se narran las peripecias de Kate, una joven de Budapest que cambia la vida urbana por una rural con sus tíos y su primo Jancsi. El motivo de que Kate se mude a vivir con sus tíos es porque su padre se ve incapaz de criarla tras la muerte de su madre. El cabecilla de la familia es el tío Márton, conocido como “El buen maestro” por su capacidad para la doma de caballos. Kate causa un fuerte impacto en su familia, pues su primo Jancsi la ve como una chica incorrecta y en ocasiones maleducada. No obstante, acabará ganándose el cariño de todos cuando aprende a montar a caballo y cuando su primo Jancsi reconoce secretamente que se siente atraído por ella y que realmente la admira. “El buen maestro” muestra la fuerza del optimismo y cómo éste se puede contagiar a otras personas.