El éxito comercial de la primera publicación de “Pablo Diablo” (“Horrid Henry” en su versión original) se vio reforzado con una tremenda acogida de las siguientes entregas de la serie, que elevaron el número de ejemplares vendidos a casi veinte millones. Esto propició la adaptación de las historias de este travieso chico a televisión, y a que incluso tenga su propio sitio web. La trama ideada por Francesca Simon y los enérgicos dibujos de Tony Ross se complementan para crear una historia fresca que bebe mucho de los antiguos pillos, idiosincráticos de la literatura infantil británica de mitad del siglo XX. Pablo Diablo es revoltoso y vive el día a día como si fuese una aventura, exprimiendo sus energías al máximo. En sus peripecias lo acompañan un sinfín de secundarios de divertidos nombres y extravagantes comportamientos. Situaciones cotidianas, tanto en familia como en la escuela, se desvirtúan y provocarán carcajadas a los lectores. Éste es el principal gancho de esta aclamada saga, imprescindible obra infantil de las dos últimas décadas.
Hay recuerdos que resultan dolorosos, momentos que te acompañan a lo largo de tu vida de forma amarga. Es inteligente saber convivir con ellos. Mucha gente se empeña en darles la espalda, y eso a la larga es perjudicial. Éste es el leitmotiv de “La aritmética del diablo”, una genial novela que muestra el Holocausto judío de una forma nada convencional. La protagonista, Hannah, es nieta de una víctima del horror de la Segunda Guerra Mundial. Sin embargo, poca atención presta a su abuelita cuando se reúnen en la Pascua judía y le cuenta sus historias. Empleando como excusa ciertos eventos de esta celebración religiosa, la fabulosa Jane Yolen (celebérrima autora de segunda mitad del siglo XX) hace viajar a Hannah en el tiempo y la transporta a los campos de concentración. El álter ego de Hanna es Chana, una huérfana deportada a Auschwitz. Esta experiencia sobrenatural permitirá a Hanna saber lo vivido por su propia abuela, y hará que finalmente empatice con sus antepasados. Premio National Jewish Book, este relato es un imprescindible de la ficción histórica de la mano de la conocida como “Esopo del siglo XX”.