El polifacético Shel Silverstein se dedicó a la literatura infantil al tiempo que también componía canciones y se aventuraba en otro tipo de retos artísticos. Su eclecticismo queda de manifiesto en “Donde el camino se corta”. Silverstein no se dirigía a un público exclusivo en esta recopilación de poemas. Pueden entretener a niños, adolescentes y adultos. De la misma forma, las temáticas que se abordan también son variopintas. Existen versos surrealistas y otros muy serios; rimas humorísticas y otras terribles. Asimismo, cualquier cosa puede suceder leyendo estos poemas en voz alta. Te pueden transmitir cualquier sensación: romanticismo, sentido del ridículo, asco, felicidad… Y es que Silverstein quería que todos los que leían sus libros se quedaran con algo, se identificaran en alguna fase de la lectura. Y vaya si lo consigue. “Donde el camino se corta” es una antología imprescindible para todos los públicos.
“¿Dónde está mi osito?” es realmente un libro de poemas repleto de ilustraciones con el que Jez Alborough aborda de forma inteligente muchos temas de la niñez y de la psicología infantil. La historia cuenta cómo Eddy, un niño que ha perdido a su peluche, se pierde en el bosque tratando de encontrarlo. No obstante, lo que de repente aparece es un osito de peluche gigante, y Eddy lo coge. Caminando por el bosque hacia unos sonidos lastimeros, Eddy se topa con un oso que tiene el peluche de Eddy en sus brazos. Curiosamente, el niño a su vez sujeta el peluche del oso. Ambos se intercambian sus juguetes y despavoridos huyen a sus casas para disfrutar de ellos. Algunos tópicos que Alborough comenta es el asombro que sufre un niño ante algo que nunca ha visto antes, lo impactado que se siente ante la diferencia de tamaños y el confort que se siente al saber que no eres el único que tienes miedo a lo desconocido.
“Donde viven los monstruos” es todo un best-seller de los libros infantiles a nivel internacional. De hecho se puede equiparar a la fama de su autor, Maurice Sendak, mucho más célebre que otros exitosos compañeros de profesión. El protagonista de la historia es Max, un niño que es encerrado en su cuarto tras amenazar a su madre. En su habitación crece entonces un bosque y Max adquiere un barco para ir “donde viven los monstruos”. Los susodichos monstruos son divertidos pero a la vez inquietantes. Max no sabe si tratar de domesticarlos, si unirse a sus fechorías o si ignorarlos. Cuando finalmente vuelve a su habitación le han servido la cena. Este espectacular cuento arroja moralejas sobre lo que uno quiere cuando no lo tiene sin ser explícito, pues realmente el lector se sumerge en las fantásticas ilustraciones y en la imaginación desbordante de Sendak.