Algunos cuentos suponen un hito por su atrevida propuesta y por su voluntad de romper tradiciones o cuestionar valores arraigados. Los libros del genial Pef (Pierre Elie Ferrier) son de este estilo, especialmente “La bella y lisa pera del príncipe de Motordu”. El relato se construye como una fantasía de estilo medieval, con príncipes, princesas, castillos, caballos, etc. El príncipe de Motordu tiene ciertos problemas a la hora de construir frases, ya que confunde unas palabras con otras. En dichos juegos de palabras y confusiones del protagonista nacen las absurdeces que dotan de sentido de humor a este relato. Por supuesto, estos ingeniosos juegos cobran sentido en el idioma original del cuento, el francés, lo cual lo convierte en una obra de difícil traducción. Aun así, el surrealismo que es narrado es plasmado también en las ilustraciones del propio Pef, y niños de cualquier región pueden disfrutar de cómo los príncipes y princesas son reducidos al ridículo en esta hilarante historia.
Este libro, creado por el matrimonio Ahlberg, resultó una innovación. Consiste en ilustraciones de personajes populares de cuentos infantiles acompañados de poesías. Además, se plantean enigmas del tipo “veo-veo” para encontrar a dichos personajes. Esta intriga lo hace un libro entretenidísimo, además por destacar por la calidad de sus ilustraciones. A medida que se avanza en la lectura se puede observar como los lugares e ilustraciones están realmente interconectadas, configurando un mundo en sí que al final es revelado en su plenitud.