Esta obra podría recomendarse con varios datos que sirven como sello de calidad. Por ejemplo, que el autor sea Meindert DeJong, ganador del Premio Hans Christian Andersen; y que tenga por ilustrador al celebérrimo Maurice Sendak. Los premios cosechados, la Medalla Newbery y el Deutscher Jugendliteraturpreis, rematan la carta de presentación. La historia transcurre en una región de Holanda, escenario de la infancia de DeJong, donde una pandilla de niños se preocupa porque en su pueblo nunca anidan la cigüeña, al contrario que en las aldeas próximas. Cuando descubren el motivo, que es la excesiva inclinación de los tejados, los protagonistas están decididos a solucionarlo colocando una rueda en lo alto. La cuestión entonces es encontrar una rueda en condiciones. Ésta aparece bajo un barco, y el problema a partir de aquí es poder cogerla antes de que suba la marea. Los niños consiguen que todo el pueblo de Shora se implique en la búsqueda, recogida y colocación de la rueda, y dos cigüeñas acaban por anidar en ella. Un relato que habla del esfuerzo y la persecución de los sueños, los cuales llegar a su consecución con la suficiente perseverancia.
La serie “Escuela para gatos”, de Esther Averill, imagina un mundo en el que los gatos tienen vidas como si fueran humanos. Las historias están protagonizas por Jenny Linsky, una gata negra neoyorquina de carácter reservado. Jenny tiene como benefactor al capitán Tinker, quien es enviado a alta mar y manda a nuestra querida gata a un internado. Allí Jenny no lo tiene fácil, y pronto desea abandonar el internado. En su intento de escape se cruza con dos gatos que se van a incorporar al internado y que le parecen a Jenny muy atractivos. Entonces vuelve al internado y se sienta junto a ellos. Pero entonces, por segunda vez, el travieso Pickles quiere chocarse con su coche de bomberos contra Jenny, y ésta sabe defenderse. Pickles y Jenny acaban siendo buenos amigos. La autora maneja a la perfección el mundo humano pero el comportamiento es bastante animal, con los instintos a flor de piel y avivando la parte irracional. Quizá esto sea lo que lo convierte a “Escuela para gatos” en una saga tan entretenida.
“La escuela Chalet” es un título de una prolífica saga de libros ambientados en un colegio de docencia trilingüe. La escuela varía su emplazamiento a lo largo de las entregas, desde el Tirol de Austria, a Inglaterra o de vuelta a Centroeuropa en Suiza. La escuela es un lugar donde suceden todo tipo de cosas, desde dramas, hasta catástrofes naturales como escenas inolvidables de ocio y diversión. El personaje principal de la saga es probablemente Joey Bettany, una chica de bravo carácter que evolucionará libro tras libro pasando de ser alumna primeriza a líder de grupo. El resto del elenco está formado por niñas de familias ricas, las cuales acompañan a Joey en sus actos de entretenimiento y descaro. Aunque la serie es lo suficientemente larga como para aborrecerla, también es incuestionablemente adictiva, así como un vivo retrato de los internados europeos en la franja intermedia del siglo XX.
Este libro es, de forma aproximada, una autobiografía de los años en el Rugby School de su autor, Thomas Hughes. Se cuenta la historia de Tom, un hijo de escudero que disfruta de su vida rodeado de grandes parcelas de campo. Como académicamente no tiene éxito en su pueblo, es enviado a la escuela de Rugby, muy estricta. A pesar de socializar rápidamente, el “gallito” de la escuela, Flashman, no para de molestarle una y otra vez. Lo acaba desafiando y acaba yendo también él por el mismo camino. Sin embargo, su desvío de la buena conducta no culmina, ya que antes conoce a George Arthur, un chico bueno y amable que le guiará para ser un exitoso estudiante y una persona de bien. Finalmente, Tom vuelve a casa, siendo una persona madura, aunque tristemente afectado por la muerte del director de la Rugby School.
Se trata de una de las historias más famosas acerca de la vida en un internado, con descripciones muy detallas de la rutina en estos centros. En ciertos aspectos puede asemejar arcaico, pero también es un vivo retrato de las escuelas inglesas en el siglo XIX.