Los “Cuentos de Otogizoshi” se podrían considerar el equivalente japonés de los “Cuentos populares chinos”. No obstante, estos últimos se fechan en la Edad Media, en el período japonés Muromachi (1392-1573). Al tratarse también de una antología, los temas tratados son muy diversos, algunos especialmente importantes en las culturas de Extremo Oriente. Algunas de las premisas más recurrentes de estos cuentos son la familia, el matrimonio, la fantasía e imaginación, y la iluminación del espíritu.
Uno de los ejemplos más reconocibles de esta recopilación es el cuento “Urashima Taro", que narra cómo un pescador que salva a una tortuga de morir a manos de unos jóvenes crueles, más adelante es recompensado por ésta con una longevidad inusitada para un humano. En este caso, se trata perfectamente el simbolismo del tiempo en el pensamiento oriental.