Michka es un oso de peluche que pertenece a una niña malcriada y caprichosa llamada Elizabeth. Un día, harto de ser maltratado, Michka se escapa de la casa en la que vive para disfrutar de libertad. Al descubrir el mundo exterior, en ese momento todo nevado, decide que no quiere volver a ser juguete. Michka saborea placeres que nunca había imaginado y se entera casualmente que la Navidad está cerca. En ese momento decide realizar una buena acción y se ofrece a ayudar a un reno a repartir regalos a los niños. Sin embargo, en el último hogar de todos el niño es pobre y ya no quedan regalados para entregar. Finalmente, Michka decide ser él mismo el regalo y renunciar a su independencia de nuevo. La historia de este osito de peluche es una de las más famosas de la francesa Marie Colmont, y trata hábilmente valores de justicia, bondad y libertad.
“El oso Uppo” es un clásico de la literatura infantil finlandesa a la vez que una oda a la amistad. El protagonista es un valiente oso que ha vivido múltiples aventuras y ha conocido el mundo entero pero sin tener ningún amigo verdadero. Un día, por accidente, llega a una playa, donde es recogido por una niña, Reeta. Uppo se queda a vivir con Reeta y su familia un tiempo, y a partir de ahí se forja una amistad indestructible entre ambos. Junto a Reeta, el oso protagonista cumple su sueño de escribir y recitar poemas, e incluso viajan juntos para vencer los miedos de ambos. Las ilustraciones son muy llamativas, típicas de los artistas escandinavos; el texto, por otro lado, es muy variopinto: contiene desde poemas hasta juegos de palabras y narración. Un libro muy apto para que los niños valoren el tener buenos amigos.
Corduroy es un conmovedor osito de peluche que ansía que alguien le saque de la tienda donde está puesto a la venta. Para ello, siempre posa como mejor sabe en su estantería. Una niña se interesa mucho por él pero la madre lo rechaza por asuntos económicos. La niña finalmente logra adquirirlo con su propio dinero. Algunas peculiaridades de esta enternecedora historia son que muestran una familia afroamericana, o el característico mono con tirantes verde de Corduroy. Una vez en la casa de la niña, el oso aprovecha cada noche para salir de aventuras. Muchos consideran que esta historia de Don Freeman está desfasada, pero lo cierto es que no contiene ningún ápice de ironía o maldad, y el mensaje de bondad es muy directo.
La obra de Bill Martin Jr.se inició con este best-seller. “Oso pardo, oso pardo, ¿qué ves?” ha vendido más de 6 millones de ejemplares, sobre todo gracias al impulso que le dio el renombrado ilustrador Eric Carle. Los dibujos de Carle son luminosas y llenas de color, y están formados por collage, seda y pintura. La sencillez del lenguaje de Martin y su ritmo poético atraen al niño a pasar una página tras otra. Y eso que la premisa del libro es muy simple: un animal se da cuenta que otro lo observa, y en la siguiente la página se repite este patrón. Los niños intentan adivinar qué es lo que ve cada animal, y de esta forma se aprenden sus nombres. Didáctica y diversión en estado puro.
Rupert el osito es un personaje muy célebre de Inglaterra. Desde su primera aparición en 1920 en el Daily Express, ha seguido apareciendo siempre salvo en contadas ocasiones. Además, fue un símbolo de la Inglaterra pacífica de mitad de siglo XX. Él vive con sus amigos en Nutwood, y es muy difícil de sorprender pese a las múltiples aventuras que vive. Es toda una estrella mediática, dando lugar a una serie de dibujos, ha aparecido en sellos, tiene sala de exposiciones e incluso ha salido en videoclips con Paul McCartney. Se han realizado libros recopilatorios de sus entrañables historietas.
Este entrañable oso ha vendido más de 35 millones de ejemplares y su popularidad es imperecedera. En la historia, llega como polizón a la estación de Paddington de Londres, procedente de Perú. El señor y la señora Brown lo acogen y le dan el nombre del lugar donde se lo encuentran. A partir de ahí Paddington es como un niño más, metiéndose en líos los cuales parecen aventuras para él mismo, enfurruñándose cuando no está de acuerdo con algo y comiendo dulces caprichosamente. Su éxito ha dado lugar a mucho merchandising e incluso se erigió una estatua de bronce en la estación de tren de Londres que le da nombre.
El personaje de Winnie the Pooh es archiconocido actualmente gracias a su inclusión en la franquicia de Disney. Sin embargo, su origen está en las ideas de A.A. Milne y E.H. Shepard, que lanzaron el primer libro de sus historias en 1926. En ellas aparecen personajes de este universo tan entrañable y reconocible. Además del propio Winnieh, y su afán por alimentarse de miel, están Piglet, Eeyore, Heffalump, Woozle, Kanga o Tigger. La narrativa destaca por un sentido del humor ingenioso y rebosante de alegría, descubriendo facetas humanas propias en este elenco de personajes de peluche.
John Prater, como otros autores, ideó sus libros infantiles al observar el comportamiento de sus hijas. Éste muestra la primera infancia de una forma cálida y cercana, con poco texto pero con imágenes simples y emocionales. La historia gira en torno a un bebé oso que no para de jugar con su abuelo oso, algo muy sencillo, pero que para el osezno supone un conjunto de aventuras. Porque, al fin y al cabo, ése es el punto de vista que tienen los más pequeños de la vida. A pesar del poco texto, éste es pegadizo y cantable, y acompaña perfectamente las expresiones de los osos.
Este libro, publicado en 1989, está escrito por el poeta Michael Rosen e ilustrado por Helen Oxenbury. El argumento está inspirado en una canción infantil que trata sobre una familia que realiza una excursión por el campo y ha de volverse a casa cuando se encuentran con un oso. El ritmo que muestra gusta mucho a los niños, que también se divierten con las diferentes onomatopeyas que van saliendo a medida que aparecen obstáculos, y luego las imitan. A pesar de las dificultades que pueden presentarse a la familia protagonista, todos hacen una piña en los peores momentos. Al final se muestra que el oso estaba triste porque quería jugar con ellos, no siendo tan fiero como se esperaba.