“La guerra de Carrie” presenta un enfoque curioso para tratarse de una novela sobre la Segunda Guerra Mundial. Los protagonistas son dos hermanos galeses, Nick y Carrie Willow, quienes son evacuados de su aldea para ser llevados a un lugar seguro. Los Willow son arrancados de su familia, y ese sentimiento de no sentirse en tu hogar y de haber perdido una parte de ti lo conservan durante todo el relato. Para más inri, los Willow son obligados a convivir con el señor Evans, quien abusa de los que están a su cargo y establece un régimen de represión. Por suerte, la hermana de Evans, Lou, se porta bien, y los chicos empiezan a hacer más amigos en su nuevo hogar. Su sentimiento de arraigo en la nueva aldea va creciendo a medida que descubren el pasado de sus habitantes. Toda una comunidad se despliega ante Carrie y Nick, y evoca la madurez en la reflexión que experimentan los adolescentes en poco tiempo. “La guerra de Carrie”, además, recibió el Premio Phoenix en 1993, signo de su importante valor literario.