Esta historia de Antonia Barber, y magníficamente ilustrada por Nicola Bayley, describe los peligros de la vida del marinero y la situación de un pequeño pueblo costero. “El gato de Mousehole” está inspirado en el folclore oral de Cornualles, y cuenta la sagacidad del marinero Tom Bawcock, quien se adentra en el mar cuando más tormenta hay para pescar para su comunidad. Un enfoque característico lo da el narrador de la historia, pues no es ni más ni menos que el gato de Tom, Mowser. Como podemos imaginar, Mowser piensa que la tormenta, los rayos y los reflejos en el mar son todo un gato gigante y malvado. Hay escenas de verdadero dramatismo en el que los dibujos captan el salvajismo de una mar bajo tormenta. Por otro lado, también se recrea la vida en el pueblo y la tranquilidad aparente en éste a pesar de los peligros de las citadas tormentas. Tom consigue pescar para los suyos y todo acaba de forma feliz. Cabe destacar el contraste entre la paz en la aldea de pescadores y la representación casi fantástica de la pesca en alta mar.