Hay recuerdos que resultan dolorosos, momentos que te acompañan a lo largo de tu vida de forma amarga. Es inteligente saber convivir con ellos. Mucha gente se empeña en darles la espalda, y eso a la larga es perjudicial. Éste es el leitmotiv de “La aritmética del diablo”, una genial novela que muestra el Holocausto judío de una forma nada convencional. La protagonista, Hannah, es nieta de una víctima del horror de la Segunda Guerra Mundial. Sin embargo, poca atención presta a su abuelita cuando se reúnen en la Pascua judía y le cuenta sus historias. Empleando como excusa ciertos eventos de esta celebración religiosa, la fabulosa Jane Yolen (celebérrima autora de segunda mitad del siglo XX) hace viajar a Hannah en el tiempo y la transporta a los campos de concentración. El álter ego de Hanna es Chana, una huérfana deportada a Auschwitz. Esta experiencia sobrenatural permitirá a Hanna saber lo vivido por su propia abuela, y hará que finalmente empatice con sus antepasados. Premio National Jewish Book, este relato es un imprescindible de la ficción histórica de la mano de la conocida como “Esopo del siglo XX”.
El contenido de “Luna de búho” es puramente lírico. El libro de Jane Yolen puede ser una de las mejores introducciones poéticas para los niños, ya que los versos están acompañados de las imágenes de paisajes nevados de John Schoenherr. La historia gira en torno a una niña que es llevada por su padre en medio de la nieve para ver un búho por primera vez. La pequeña protagonista quedará fascinada no sólo por el búho, sino por otras maravillas naturales que irá descubriendo. Es un cuento que resulta muy interesante para despertar la curiosidad por la naturaleza, para venerar las maravillas que nos rodean y para impulsar el respeto por el medio ambiente. También resalta la importancia del amor paternal. Todas estas cualidades lo convirtieron en el ganador de la Medalla Caldecott en 1988. El trasfondo está basado en experiencias propias de la autora en su granja de Nueva Jersey.