“Sopa de calabaza” es un relato escrito por Helen Cooper que muestra valores sobre la amistad y el compañerismo, y cómo esto se puede quebrantar por culpa de las envidias y las vanidades. Los protagonistas son un gato, un pato y una ardilla. Los tres viven juntos y se complementan. A los tres animales les apasiona la música, y forman un grupo en el que cada uno toca un instrumento diferente. Por otro lado, para comer, suelen preparar sopa de calabaza y cada uno tiene un cometido diferente en la cocina. Todo va sobre ruedas hasta que Pato se enfada y quiere estar por encima de los demás. Tras discutir, se escapa de casa. Gato y Ardilla esperan su regreso pero esto no sucede. Finalmente, preocupados, van en rescate de Pato y al cesar su búsqueda entonces éste aparece de nuevo en casa. El cabreo de Pato ha pasado, pero insiste en que quiere cambiar los roles en los instrumentos del grupo. Cuando los tres vuelven a llevarse de maravilla la historia transmite la importancia de superar las diferencias entre personas para tener una buena relación, y como esto es el primer paso para una longeva amistad. Además del texto, Cooper supo complementarlo a la maravilla con sus ilustraciones, y por ello “Sopa de calabaza” fue premiado en 1998 con la Medalla Kate Greenaway.
Los cuentos de Alison Uttley, especialmente “La Ardilla, la Liebre y la Conejita Gris” disfrutaron de un tremendo éxito desde su primera publicación. Las historias son inteligentes pero sin perder ápices de sencillez. De esta forma, los niños tratarán de imitar a estos entrañables animales, los cuales son un ejemplo en cuanto a la enseñanza de valores morales. Se tratan temas como la amistad verdadera, el amor por la naturaleza, las experiencias primerizas o el aprendizaje de los errores. Además de divertir, este libro instruye. Por ello debería considerarse un imprescindible de la literatura infantil.