La historia que se cuenta en “El pudding mágico” es puro surrealismo atractivo. El protagonista es Albert, un pudding con mal humor que puede cambiar de sabor a su voluntad y no se acaba. Unos ladrones, que son una zarigüeya y un wombat, pretenden robarlo. Pero Albert es protegido por una sociedad de amigos formada por el marinero Bill, el pingüino Sam y el koala Bunyip. Los cuatro viven aventuras y se encuentran con variopintos personajes, siempre intentando proteger a Albert y no perderlo. El libro describe con habilidad la necesidad de protegerse unos a otros, de buscar la paz y de la amistad. El autor, Norman Lindsay, lo escribió estando de luto por la muerte de su hermano en la Primera Guerra Mundial. Sus dibujos son muy peculiares y el humor mostrado es muy gracioso.
Este reconocido marsupial es uno de los personajes más famosos de la literatura infantil australiana. La neozelandesa Dorothy Wall se inspiró en las fantasías de su hijo. Además del protagonista, multitud de criaturas y paisajes autóctonos desfilan por las páginas de este libro, defendiendo de manera inocente la cultura australiana y sus costumbres. De hecho, muchos ven en Blinky al obrero australiano por excelencia. Una curiosidad es que a lo largo de la colección los pantalones que usa Blinky son cada vez más largos conforme va creciendo. Se han hecho reediciones en color recientemente de esta genial serie.