Un maestro de la literatura infantil británica en los últimos años es Dick King-Smith, distinguido también por su longeva trayectoria. El género más cultivado por King-Smith, que el propio autor bautizó como “fantasía de granja”, también queda plasmado en “El ahuyentador de cuervos” (“The Crowestarver”), y esta vez además fue premiado con el Nestlé Children’s Book Prize. Spider Sparrow es un adolescente que vive en plena campiña inglesa en el seno de una familia que lo adoptó al encontrarlo abandonado. Las tradiciones se hacen fuertes en esta historia en la que Spider se va de la escuela y se pone a trabajar como ahuyentador de cuervos, al tiempo que se forma toda una pandilla con otros animales. Elementos esenciales de la obra del escritor como el culto al trabajo agrícola y las granjas están presentes en todo momento. Por otro lado, el drama irrumpe en la narración con la prematura muerte de Spider por una enfermedad hereditaria fulminante. Aunque el lector sentirá la misma pena que los padres de Spider, King-Smith sabe infundir un mensaje de esperanza ante la vida y las formas de aprovecharla siendo siempre feliz.