Los cuentos de la escritora sueca Lena Anderson suelen mostrar situaciones simples pero tremendamente reconocibles y entrañables. “Stina” es uno de esos cuentos. La protagonista, que da título al libro, es una niña que pasa las vacaciones de verano con su abuelo en una pequeña isla. El entorno es un reducto de tranquilidad ideal para relajarse y para disfrutar de la naturaleza. Stina valora actividades como ir a pescar, pasear o jugar en la playa. No obstante, llega un momento en que se aburre, como cualquier otro niño, y decide emprender una aventura ella sola. Lena Anderson continuó la historia con una secuela en la cual Stina y su abuelo visitan a un amigo de esto y reviven viejas historias. El texto, el cual resalta valores de amistad y de la añoranza de la infancia, está acompañado por las bellas acuarelas de Anderson, las cuales reviven a la perfección la Suecia más infantil y próxima al mar.